Comentario de texto (nivel ESO) de «Ut y las estrellas»

Obra: Ut y las estrellas

Autora: Pilar Molina Llorente

Editorial: Noguer

Número de páginas: 124

Año de edición: 1995

País de edición: España

Sinopsis: Ut es hijo de uno de los cazadores mejor considerados de una tribu prehistórica que, a diferencia de sus dos hermanos, aborrece la caza y la guerra. Él busca algo más: una explicación a la violencia y una salida para evitar la crueldad. Su actitud ante la vida, su amor por los demás y su inquietud creadora le hacen diferente y por ello, a la vez, temido y repudiado. Un libro que es un verdadero alegato contra la violencia.

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De nuevo, comparto con vosotros un comentario de texto (en este caso, más breve que el de El señor del cero, ya que responde a un modelo de examen para secundaria - ESO) 👀 ¡Suerte, jóvenes estudiantes!

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Pilar Molina Llorente nació en Madrid. Desde muy pequeña su principal entretenimiento era inventar historias, crear personajes, vivir aventuras con todo lo que caía en sus manos y buscar un final diferente a los cuentos o a las películas. Estudió Bellas Artes con la idea de seguir inventando personajes a través de la pintura, pero pronto se dio cuenta de que podía vivir todas las aventuras, por imposibles que pareciesen, sólo con la imaginación. Una vez creados los personajes y puesta en marcha una historia, comprendió que lo mejor era compartirlo y fue entonces cuando empezó a escribir.

El primer libro que publicó obtuvo el Premio Doncel de Novela y esto le animó a seguir contando aventuras a los jóvenes.

 

Resumen del libro (contiene spoilers) 💥

Ut es un personaje que vive en una aldea del mesolítico en la Prehistoria. Ut es muy pacífico y odia la violencia y todo lo relacionado como la caza o la guerra. Todos, en especial su padre Ur-Boa lo tratan de vago por no cazar. Un día se adentró en el bosque a lado de un lago hizo un montoncito de barro y al día siguiente estaba seco. Poco a poco fue creando y decorando cacharros de arcilla que dio a su madre la primera y a más gente, y tallando la madera, y esa se convirtió en su tarea de la tribu. Por su extraño talento, la tribu sobre todo Oa, su hermano pequeño, piensa que es el hechicero de Cao y por eso le gente de la aldea lo teme y desprecia.

Un día el jefe Taba, jefe de la Tribu Taba, tribu de Ut le manda esculpir en la madera a los dioses Zil (dios del bien) y Cao (dios del mal) y subirlos a la montaña sagrada (templo del que se piensa que en él viven los dioses). Así lo hizo Ut. El jefe Taba le dejó a Ut una cueva para que trabajara en ello. Esa cueva se transforma en el hogar de Ut. Al llegar a la montaña, Ut entra en la cueva y descubre que su religión politeísta no es verdadera y que todo es falso. Entonces decide adorar a un solo dios, su dios, libre como el aire, claro como el agua, infinito e intenso como el frío del viento, el Sol. En la montaña ve a un animal pastando y se le ocurre comer también hierba, la cuece y la come, ya no sufre la necesidad de cazar. Ut empezó a trabajar dentro de su nueva cueva cuyos componentes parecen ser de cristal. Ut pinta en las paredes.

Algún tiempo después, su hermano mayor, Bar. Les cuenta a todos que quiere casarse con Mila, la hija del Luza, jefe de una tribu próxima llamada Tribu del Luza con la que habían logrado mantener la paz y Ur-Boa tiene miedo de que se rompa esa paz, sin embargo, acepta ir con él a ver al jefe Luza. Un tiempo después, Bar volvió lleno de heridas con el cadáver de Ur-Boa a sus espaldas. Tas llegar se desmaya. Bastante tiempo después, despierta y les cuenta a todos lo que pasó. Les cuenta que cuando llegaron todo fue bien con el jefe Luza y su hijo Fel, pero cuando Bar le cuenta al jefe Luza que quería casarse con Mila, el jefe Luza se opuso y les dijo que su hija se casaría con un jefe de tribu. Bar propuso que fuera Mila la que decidiera con quien casarse. Cuando Mila dijo que quería casarse con Bar, el jefe Luza  la pegó bar se lanzó contra él y Ur-Boa también, este murió así. Enterraron a Ur-Boa frente a la montaña sagrada.

Oa decidió ir a vengar a su padre, Ut fue con él para evitar que lo mataran o que él matara a alguien. Fueron en una barca a su tribu. El jefe Luza echó a Oa de su tribu y tomó a Ut de rehén. Oa, se llevó a la princesa Mila a su tribu. Y Ut fue puesto a cargo de su hijo Fel, con el que hizo buenas migas. Fel decidió ir a cazar en el duro invierno que atormentaba a la tribu Luza, Ut le acompañó, pero siempre que Fel mataba al animal, Ut miraba a otro lado. Ut le enseñó a Fel las cosas que hacía: tallar en la madera, hacer cosas con cerámica, sus inventos… Fel tampoco comprende a Ut, Pero lo respeta. Fel le contó a Ut que lo único que le asusta es una criatura de la que su abuelo le contaba historias. Una criatura enorme, escamosa y feroz (un dinosaurio). Un día, mientras Fel va a cazar y Ut le acompaña, se topan con ese ser inmenso. Fel queda aterrorizado, no se atreve ni a dispararle una flecha. Cuando el dinosaurio está a punto de matar a Fel, Ut lo mata a él tirándole una piedra en el ojo, así consiguen mucha carne para la tribu y sobrellevar así el duro invierno. El jefe Luza le agradece a su hijo el cazar al monstruo, pero Fel contó la verdad de lo que había pasado atribuyéndole el mérito a Ut. El jefe Luza decide que le debe la vida de su hijo a Ut.

El invierno cada vez se va alejando más y más. En la tribu Luza, Ut ha empezado a ganar respeto y admiración gracias ha haber matado al monstruo, lo que a Ut le parece despreciable, pero agradece la tranquilidad de la tribu. Fel y Ut fueron por las casas de la tribu dando los cacharros que creaban, cunando llegaron a la cueva ya de noche, Ut miró a la montaña sagrada y le dijo a Fel que debería volver a ella. Fel creyó que estaba loco, pero Ut le contó que ya había subido, que él había creado las estatuas de Zil y Cao. Fel le dijo que con razón creían que era el hechicero de Cao. Ut le siguió contando que los dioses no existían, que solo existía un único Dios. Esa misma noche, el jefe Luza le pidió a Ut que hiciera armas para su ejército, pues iban ha hacer una guerra contra la tribu de Taba, la tribu de Ut. Este se negó, le dijo a Luza que si quisiera lo matara pero que él no haría nada contra su tribu y Luza le dejó vivir Porque le debía la vida de Fel. Fel vaciló, insistiendo en que su ira solo debería revelarla con Bar por llevarse a Mila, pero no con una tribu entera. Sin embargo, no se atrevía a volverse contra su padre y aceptó ir. Ut quería evitar la guerra así que decidió escaparse e ir ha avisar a su tribu. Pero Fel lo descubrió y le tiró una flecha al hombro para pararlo. Luego, se lo llevó a su cueva y lo vedó. Pero Ut no se rindió, volvió a escapar hasta llegar a su tribu y ver a su familia. Oa, Bar y Mila quedaron muy sorprendidos de verlo. Ut les contó lo que había pasado y le pidió a Oa que se llevara a Mila al lugar donde talló a los dioses de madera en la plataforma de la montaña sagrada, le pidió que llevara también a su madre pero le contaron que ella murió cuando fue a por agua y murió abrazada al jarrón que le hizo Ut. Fel lo había seguido, pero Ut logró convencerlo de que la guerra no era la solución y que tendrían que evitarlo, que la venganza solo satisface al orgullo, que Mila había ido por su voluntad para casarse con Bar. Fueron hacia donde estaban Oa y Mila y decidieron subir al templo de los dioses, aunque todos tenían miedo menos Ut y Fel. Ut, para calmar el miedo, golpeó a los dioses y les explicó que eran de madera, no dioses reales, y que solo era un reflejo de lo que él imaginó. Durmieron allí esa noche. Ut le enseñó a Fel la cueva de cristal en la que él trabajaba en verano con sus cosas de arcilla, y le enseñó a Fel los altares de los dioses pequeños que no eran más que cosas sin sentido, una piedra vieja, cenizas etc. Al amanecer, Ut tuvo una idea. Taba y Luza estaban discutiendo ante de comenzar la improvisada guerra por Mila. Ut le prendió fuego al dios Cao y lo arrojó rodando por la montaña hasta llegar cerca de donde se disponía la disputa. El chamán de Taba dijo que si no había guerra habría comida y abundancia para ambas tribus. No hubo guerra, pero las tribus decidieron celebrar un combate cuerpo a cuerpo, Bar contra Fel.

Ut no quería que ninguno muriera, pero no podía hacer nada. Al día siguiente comenzó la lucha. Fel se fue dejando ganar por Bar, pero cuando Fel cayó al suelo. Bar no lo mató, dijo que Ut tenía razón, la venganza solo satisface al orgullo. Oa fue con su cuchillo con el fin de matar a Fel, pero Ut lo detuvo, Oa dijo que Ut era el culpable de la cobardía de Bar, desde entonces odió a Ut. El jefe Luza se sintió orgulloso de Fel. Ut y Fel serían siempre amigos. Un tiempo después, el jefe Taba y el consejo decidieron desterrar a Ut, porque solo traía problemas, pero no podían matarlo al ser el hechicero de Cao. Ut se fue al día siguiente, solo echaría de menos a su familia, al claro del bosque y a su pequeño altar de cristal.

Muchas generaciones después contaron la historia de Ut, tergiversándola hasta el límite de creer que Ut, era el Yeti.

Opinión personal

Después de casi catorce años desde la última vez que lo leí, el libro de Ut y las estrellas me ha parecido una buena historia infantil. Didáctica respecto al contexto histórico de la Prehistoria, con una moraleja muy clara contra el uso de la violencia y con un lenguaje sencillo, claro y conciso.