Reseña: «El coche fantasma»

 Obra: El coche fantasma

Autor: R. L. Stine

Editorial: Ediciones B

Año de edición: 2002

País de edición: Estados Unidos

Número de páginas: 144

Sinopsis: Intenté hacer los deberes, pero me levantaba cada dos por tres para mirar el coche desde la ventana de mi cuarto. Bajo la luz de una farola, los parachoques cromados lanzaban destellos y la lustrosa carrocería azul resplandecía.

🚗👻🚗👻🚗👻🚗👻

¡Buenas tardes, contraportadistas, y bienvenidos a una nueva reseña pensada para el mes más spooky del año! Hoy, el afamado autor de terror juvenil, R. L. Stine, vuelve a formar parte del blog con la reseña de uno de sus grandes clásicos: El coche fantasma.

La trama comienza cuando los coches del protagonista compran un coche de segunda mano y empiezan a acaecer una serie de situaciones extrañas y espeluznantes. Stine recurre a su prototipo de protagonista: un dulce preadolescente bastante inocente y algo escéptico. La elección de este personaje no sólo es de lo más adecuada para captar a la audiencia a la que se dirige este libro, sino que crea un magnífico contraste entre la inocencia del protagonista y el horror de todas las situaciones paranormales que está a punto de vivir.

Esta noveleta cortísima —de tan sólo 144 páginas— destaca por su enorme capacidad para tejer intriga y misterio en cada página. No obstante, no podemos pasar por alto algunos puntos que podrían considerarse negativos en esta obra. La previsibilidad en ciertos giros de la trama es uno de ellos. De hecho, en ciertos puntos de la narrativa se puede notar cierta dependencia de convenciones comunes del género de terror, por lo que la novedad se pierde (salvo que te estés iniciando en el género, precisamente, con este libro).

Explorando las curiosidades que rodean El coche fantasma, quisiera destacar la capacidad de Stine para convertir elementos cotidianos, como un simple coche, en la esencia del terror. Además, la meticulosidad con la que el autor plasma la ambientación y detalla cada escenario contribuye significativamente a la inmersión del lector en la obra.

En conclusión, esta obra —pese a lo predecible y convencional—, ofrece una travesía única y cautivadora en el vasto panorama del terror literario. De hecho, es una novela perfecta para iniciarse en el género de terror y gustará, incluso, a los que no son muy aficionados a este género literario.

Si este libro te interesa, no dudes en darle una oportunidad a la reseña de Mi mejor amigo es invisible, también de R. L. Stine. ¡Te pondrá los pelos de punta!

¿Qué libros de terror tenéis en vuestras estanterías? ¡Decídnoslo en los comentarios!