Autor: Douglas Preston y Lincoln Child
Obra: El laberinto azul
Editorial: Plaza y Janes editores
Formato: Ebook
Año de publicación: 2015
Resumen: En la decimocuarta entrega de la serie del inspector Pendergast, la siniestra sombra de una venganza ancestral amenaza la vida del agente del FBI.A las nueve y veinte de la noche llaman al timbre de la residencia neoyorquina del agente especial Aloysius Pendergast y la fiel Constance Greene acude a abrir. En el umbral ap arece Alban, el hijo de Pendergast, cuyo cuerpo atado con cuerdas gruesas cae estrepitosamente al suelo. Está muerto. Su padre sale a la calle y persigue sin éxito a un sospechoso coche negro. Un informe dictaminará más tarde que el cadáver no presentaba signos de violencia, ni restos de alcohol o drogas. A Alban le partieron el cuello en un crimen planeado al detalle e impecablemente ejecutado, obra de profesionales.Al día siguiente el teniente Peter Angler, encargado del caso, habla con el padre de la víctima y su actitud le desconcierta. Pendergast le informa de que apenas tenía relación con su hijo, se declara incapaz de especular sobre las causas del crimen y aparentemente no tiene interés en cooperar con la investigación policial. Pero, en cuanto llega a casa, Pendergast accede a la base de datos de homicidios no resueltos y localiza los resultados de ADN del llamado Asesino de los Hoteles, cuya brutalidad mantuvo en vilo a Manhattan...
Me gusta la forma de desenmarañar el misterio dejando pequeñas pistas para que sea el propio lector el que intente resolverlo una y otra vez mientras va cayendo en la trampa igual que el protagonista. Con esto me refiero a que la novela juega con la mente del lector, y cada vez que parece que nuestro protagonista va a resolver el miesterio, surgen nuevos misterios y tiene que empezar de nuevo. Otro punto positivo de la novela es la evolución de los personajes de un modo inesperado. Al principio los dos personajes masculinos, Pendergast y D'Agosta, parecen tener controlada la situación, son los fuertes y decididos; mientras que los personajes femeninos, Constance Green y Margot Green, son delicados, vacilantes y necesitados de protección. Estos estereotipos cambian poco a poco, cuando los personajes masculinos demuestran no ser tan fuertes, hasta el punto de que la vida del protagonista dependerá del valor que muestren las mujeres de la novela. También intenta mostrar que las personas pueden cambiar su carácter a través del personaje de Alban. Casi se podría decir que la moraleja de la novela reside en que todos podemos cambiar y evolucionar.
No me gusta el uso de algunas técnicas de control mental del protagonista; sus técnicas de criminología son extremadamente sobreactuadas (el protagonista parece ser capaz de extrapolar la mente de su cuerpo para observar la escena pasada del crimen); me parece muy artificial y fuera de lugar. Un último detalle que no fue de mi agrado es que llegó a empalagarme la utilización del adjetivo "espartano", pero no sé si achacar la culpa de esto a los escritores o al traductor.
Aun así me ha gustado mucho, y recomiendo esta novela a todos los amantes de la novela negra y el género policiaco.
0 Comentarios