Autor: Stephen Chbosky
Narrador: Arturo Mercado
Narrador: Arturo Mercado
Obra: Amigo imaginario
Formato: Audiolibro
Número de horas: 24:01:06
Número de páginas: 816
Editorial: Planeta
Plataforma: Storytel
Sinopsis: Kate Reese es una madre soltera que escapa de una relación de abuso para empezar desde cero en el pueblo Mill Grove, junto a su hijo de siete años, Christopher. Pero Mill Grove no resulta ser ese lugar seguro que cree: Christopher desaparece en un bosque cercano, donde hace cincuenta años tuvo lugar otra desaparición similar de un niño que nunca fue resuelta.
Seis días después de su desaparición, Christopher aparece, sin un rasguño, pero no es el mismo. Guarda un secreto: una voz en su interior le alerta de una tragedia que está a punto de ocurrir y que sacudirá todo el pueblo. La voz de este nuevo amigo también le dicta una misión: construir junto a sus amigos una casa en un árbol en el bosque, que le permitirá a este amigo escapar de la prisión donde lleva encerrado muchos años.
Sin saberlo, Christopher, Kate y resto de los habitantes de Mill Grove están destinados a jugar un papel en una batalla entre el bien y el mal que los llevará a luchar por sus propias vidas.
Amigo imaginario es una novela de terror psicológico con elementos propios del género fantástico y un ligero toque de suspense. Se trata de la primera obra que leo del autor y la experiencia ha sido, cuanto menos, entretenida.
Christopher no tiene una vida fácil. Su padre se suicidó, el actual novio de su madre los maltrata y, encima, sufre bullying por su dislexia y malas calificaciones. Tratando de dejar esta vida atrás y buscar un futuro mejor para su hijo, Kate (la madre de Christopher) se muda con él al típico pueblito de Pensilvania que está en medio de ninguna parte. En ese punto, la historia de Christopher se ve irremediablemente unida a la de David, un niño muy parecido a él que desapareció 50 años atrás, dejando detrás de sí un gran misterio que los personajes irán desentrañando conforme avance la trama.
En este audiolibro de 24 horas (unas 800 páginas), conocemos a una gran cantidad de personajes secundarios. Más allá de su relación con el protagonista, descubrimos sus miedos, sus anhelos y sus inquietudes. Y es que toda esta novela es una gran reflexión sobre qué significan realmente el bien y el mal. ¿Qué es pecado y qué es un vicio inocente? ¿Qué es pura maldad y qué es el mero resultado de una vida difícil?
Christopher se ve arrastrado hacia la batalla entre dos misteriosos y siniestros personajes: la mujer siseante y el hombre amable. ¿En quién puede confiar dentro del Mundo Imaginario? ¿Todo lo que ve es real o fruto de sus alucinaciones? Esta sensación de agobio e impotencia se traslada completamente al lector, que no puede sino escuchar el audiolibro a altas horas de la noche esperando no soñar luego con ojos y bocas cosidas, siseos de serpiente, personas-buzón y dientes de bebé.
También me parece remarcable el papel que adquiere la religión en todo momento. Me abstendré de spoilers y de creencias personales, pero sí subrayo que a lo largo del libro se le da muchas vueltas al tema de la Biblia y a la eterna pregunta de por qué Dios permite que haya mal en el mundo.
Es decir, que tenemos un argumento convincente, multitud de personajes redondos, un protagonista con el que es fácil identificarse (sin importar la edad del lector), y multitud de cuestiones éticas e ideológicas que dotan a esta obra de terror de una profundidad que va mucho más allá que los meros sustos. Adelanto que este libro tiene moraleja y que merece mucho la pena.
No obstante, nada es perfecto, y desde mi punto de vista, este libro adolece mucho de un costado... Estoy hablando de la igualdad de género. Para un libro que se ambienta en la época actual, la cantidad de clichés sexistas que hay es para lograr que a cualquier feminista le hierva la sangre. Y lo que más miedo me da de esta novela de terror es entender que, en este mismo instante, los pequeños pueblecitos de Pensilvania siguen siendo así de machistas. Todos los personajes femeninos (salvo, tal vez, la mujer siseante), vienen circunscritos a su papel de madres y/o esposas. Ellas son las que se encargan de sus hijos (que, de verdad, parece que no tienen padres) y de sus casas (todas se encargan de limpiar y cocinar para sus esposos, incluso las que tienen trabajo). La mayoría, renunciaron a sus oficios al casarse y las tres o cuatro que aún trabajan se dedican a esas profesiones que podríamos calificar como "típicamente femeninas": enfermera, maestra de escuela y cuidadora de ancianos. ¿Es muy respetable? Por supuesto, pero no se refleja ni un mínimo de diversidad. Solamente sale una pareja de lesbianas en todo el libro para dar un poco de aire fresco, pero SPOILER, van a terapia de pareja porque no son felices juntas, FIN DEL SPOILER. Además, no falta toda esa amalgama de tópicos rasposos del tipo "la mujer debe llegar virgen al matrimonio o si no es una puta" (pero los hombres no tienen esa obligación), "que la mujer tenga deseo sexual es un pecado", o que el insulto recurrente de un niño a otro sea decirle: "¿acaso eres una niñita?".
Mi reacción:
Por suerte, al final se empodera un poco a Kate, pero no diré más.
Para finalizar, un gran aplauso psicológico para Arturo Mercado, que ha puesto voz a este audiolibro con un talento innegable.
En conclusión, es un libro que me ha gustado (a pesar de esos detalles negativos) y que no está nada mal. Eso sí, hay que echarle muchísima paciencia para no perder el interés entre tanta página. Siendo sincera, creo que el autor se habría podido ventilar unas 200 páginas y la historia apenas habría cambiado, no obstante, no es más que una apreciación personal.
Por último, congratularme de que con la lectura de Amigo imaginario he podido cumplir con dos retos literarios personales para este 2020:
Christopher no tiene una vida fácil. Su padre se suicidó, el actual novio de su madre los maltrata y, encima, sufre bullying por su dislexia y malas calificaciones. Tratando de dejar esta vida atrás y buscar un futuro mejor para su hijo, Kate (la madre de Christopher) se muda con él al típico pueblito de Pensilvania que está en medio de ninguna parte. En ese punto, la historia de Christopher se ve irremediablemente unida a la de David, un niño muy parecido a él que desapareció 50 años atrás, dejando detrás de sí un gran misterio que los personajes irán desentrañando conforme avance la trama.
En este audiolibro de 24 horas (unas 800 páginas), conocemos a una gran cantidad de personajes secundarios. Más allá de su relación con el protagonista, descubrimos sus miedos, sus anhelos y sus inquietudes. Y es que toda esta novela es una gran reflexión sobre qué significan realmente el bien y el mal. ¿Qué es pecado y qué es un vicio inocente? ¿Qué es pura maldad y qué es el mero resultado de una vida difícil?
Christopher se ve arrastrado hacia la batalla entre dos misteriosos y siniestros personajes: la mujer siseante y el hombre amable. ¿En quién puede confiar dentro del Mundo Imaginario? ¿Todo lo que ve es real o fruto de sus alucinaciones? Esta sensación de agobio e impotencia se traslada completamente al lector, que no puede sino escuchar el audiolibro a altas horas de la noche esperando no soñar luego con ojos y bocas cosidas, siseos de serpiente, personas-buzón y dientes de bebé.
También me parece remarcable el papel que adquiere la religión en todo momento. Me abstendré de spoilers y de creencias personales, pero sí subrayo que a lo largo del libro se le da muchas vueltas al tema de la Biblia y a la eterna pregunta de por qué Dios permite que haya mal en el mundo.
Es decir, que tenemos un argumento convincente, multitud de personajes redondos, un protagonista con el que es fácil identificarse (sin importar la edad del lector), y multitud de cuestiones éticas e ideológicas que dotan a esta obra de terror de una profundidad que va mucho más allá que los meros sustos. Adelanto que este libro tiene moraleja y que merece mucho la pena.
No obstante, nada es perfecto, y desde mi punto de vista, este libro adolece mucho de un costado... Estoy hablando de la igualdad de género. Para un libro que se ambienta en la época actual, la cantidad de clichés sexistas que hay es para lograr que a cualquier feminista le hierva la sangre. Y lo que más miedo me da de esta novela de terror es entender que, en este mismo instante, los pequeños pueblecitos de Pensilvania siguen siendo así de machistas. Todos los personajes femeninos (salvo, tal vez, la mujer siseante), vienen circunscritos a su papel de madres y/o esposas. Ellas son las que se encargan de sus hijos (que, de verdad, parece que no tienen padres) y de sus casas (todas se encargan de limpiar y cocinar para sus esposos, incluso las que tienen trabajo). La mayoría, renunciaron a sus oficios al casarse y las tres o cuatro que aún trabajan se dedican a esas profesiones que podríamos calificar como "típicamente femeninas": enfermera, maestra de escuela y cuidadora de ancianos. ¿Es muy respetable? Por supuesto, pero no se refleja ni un mínimo de diversidad. Solamente sale una pareja de lesbianas en todo el libro para dar un poco de aire fresco, pero SPOILER, van a terapia de pareja porque no son felices juntas, FIN DEL SPOILER. Además, no falta toda esa amalgama de tópicos rasposos del tipo "la mujer debe llegar virgen al matrimonio o si no es una puta" (pero los hombres no tienen esa obligación), "que la mujer tenga deseo sexual es un pecado", o que el insulto recurrente de un niño a otro sea decirle: "¿acaso eres una niñita?".
Mi reacción:
Por suerte, al final se empodera un poco a Kate, pero no diré más.
Para finalizar, un gran aplauso psicológico para Arturo Mercado, que ha puesto voz a este audiolibro con un talento innegable.
En conclusión, es un libro que me ha gustado (a pesar de esos detalles negativos) y que no está nada mal. Eso sí, hay que echarle muchísima paciencia para no perder el interés entre tanta página. Siendo sincera, creo que el autor se habría podido ventilar unas 200 páginas y la historia apenas habría cambiado, no obstante, no es más que una apreciación personal.
Por último, congratularme de que con la lectura de Amigo imaginario he podido cumplir con dos retos literarios personales para este 2020:
- Leer un libro de más de 600 páginas.
- Escuchar un audiolibro.
¿Cuál ha sido el libro más largo que has leído? ¡Dímelo en los comentarios!
3 Comentarios
-uff tengo este libro pendiente de subir mi opinión, y definitivamente no es para mi.
ResponderEliminarB7s
¡Hola, Gema!
ResponderEliminarEste libro tiene buena pinta aunque lo del número de páginas y alguna opinión negativa que he leído por ahí me echen para atrás. Me lo apunto por si acaso, mil gracias por la reseña. Por cierto, es súper interesante que lo hayas disfrutado como audiolibro y me ha encantado el meme que has incluido para expresar tu sensación en ese momento, jajajaj.
Un saludo💗
Holaa, mira que lo he visto alrededor pero no me termina de animar porque no disfruto del terror, pero vaya que tiene un buen argumento, lo de hacerte pensar y dudar de muchas cosas es un buen detalle, si acaso lo que mencionas de la igualdad también me crisparía los nervios ._.
ResponderEliminar¡Beesos! :3