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Reseña: «Sinuhé el Egipcio»

Sobre un fondo con jeroglíficos, el ebook con la portada en verde de Sinuhé el Egipcio. Puntuación de cuatro estrellas

Obra: Sinuhé el Egipcio

Autor: Mika Waltari

Editorial: Círculo de Lectores con Plaza & Janés

Año de edición: 1945 (de esta edición: 1973)

Idioma: Finlandés

Traductor: Manuel Bosch Barret

Número de páginas: 760

Sinopsis [de Wikipedia]: Su trama transcurre en el Antiguo Egipto, durante el reinado del faraón Akenatón, de quien se afirma que fue el primer gobernante monoteísta. El protagonista de la novela, sin embargo, no es el faraón, sino Sinuhé, el médico real, quien cuenta la historia en el exilio después de la muerte de Akenatón, además de haber perdido su posición debido a su fracasada relación con una cortesana. Aparte de los sucesos ocurridos en Egipto, la novela también relata los viajes de Sinuhé por Babilonia, la Creta Minoica, entre los hititas y otros pueblos vecinos. 

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¡Buenos días, contraportadistas! ¡Gema López os desea una feliz vuelta a la rutina! Para amenizaros la vuelta al cole y/o la vuelta al curro, en esta ocasión vamos a hablar de un clásico de la literatura finlandesa que los amantes de la novela histórica van a ADORAR.

Sinuhé el Egipcio llegó a mis manos gracias a la iniciativa de book crossing del centro comercial de mi ciudad. Este extenso libro —tiene 760 páginas, pero la letra es diminuta y apenas tiene espaciado, así que podrían considerarse 900 páginas fácilmente— relata en primera persona la biografía de Sinuhé desde que era un bebé hasta su vejez en el exilio. Es cierto que la historia es un poco Crónica de una muerte anunciada, ya que en las primeras páginas se nos adelanta que las cosas no acabarán bien para el pobre Sinuhé, pero aun así el relato consigue mantener la intriga y el misterio sobre cómo nuestro protagonista se tejió su propio destino.

El libro se divide en diez capítulos, cada uno con una etapa vital de Sinuhé. En el primero se nos narra cómo fue encontrado en una cesta de cañas que bajó por el río —¿no os suena un poco a la historia de Moisés?—, en los siguientes se van narrando sus aventuras fundamentales —cómo se hizo médico, cómo una cortesana le timó aprovechándose de su amor y buena fe, cómo huyó al resto de pueblos de Oriente Medio ejerciendo de espía para un amigo soldado, el resto de sus trágicos amores...— hasta llegar a los hechos que le llevaron al exilio.

Aunque está escrito con un lenguaje algo más intrincado que la literatura actual —algo propio de cualquier clásico del siglo XX—, la verdad es que se trata de una lectura bastante amena y creíble. El libro narra a la perfección la forma de vida del Antiguo Egipto y de culturas como la cretense, la babilónica y la mesopotánica; siempre desde la verosimilitud y el realismo. Waltari hizo un fantástico trabajo de documentación y no dudó en incluir a personajes históricos reales como Nefertiti, Akenatón o Tutankamón. Tampoco le tembló el pulso al establecer paralelismos y hacer referencias bíblicas —véase la relación entre Sinuhé y Moisés, la aparición de una zarza en llamas en el desierto, el culto de los bandidos a Jahvé y un largo etcétera—, ya que uno de los temas fundamentales de la narración es la aparición del monoteísmo de la mano del faraón Akenatón, que afirmó que el dios Atón —cuyas facultades son las del Dios cristiano, judío y musulmán— era el único dios verdadero y debía prevalecer sobre otros dioses como Amón que era el referente en Tebas. Acción no falta, ya que tenemos una pequeña guerra mundial, otra guerra santa, otra guerra civil... ¡ni Juego de Tronos!

Es más, el escritor no se limitó a establecer un lienzo en el que documentar la forma de vivir de la época, los conflictos y las peripecias del viaje de Sinuhé, sino que plasmó entre líneas varios temas que fueron tan relevantes en 1945 como lo pueden ser hoy en día: la crítica a la guerra y cómo el pueblo siempre es el que paga el pato en este tipo de conflictos, la corrupción política o el uso de las instituciones religiosas para controlar y crear miedo, la multiculturalidad, la esclavitud, la división entre ricos y pobres, la inflación económica y la globalización, entre otros. Además de estas preocupaciones colectivas, también se mete en las preocupaciones individuales, como la soledad no deseada, la espiritualidad religiosa, el relativismo ético o el arrepentimiento. Todo esto tratado con inteligencia, mostrando sin adoctrinar y desde el respeto.

La conclusión es que Sinuhé el Egipcio es una obra imprescindible si te gusta la novela histórica, con mucha acción y un trasfondo psicológico. Eso sí, esta novela NO ES una lectura ligera, sino una obra de digestión lenta que se disfruta mejor si se va leyendo poquito a poquito en varios días.

¿Habéis hecho book crossing alguna vez? ¿Qué joyitas habéis encontrado por casualidad en mercadillos de libros y lecturas de segunda mano? ¡Decídnoslo en los comentarios! 

Comentarios

  1. Si que es un libro extenso pero yo lo disfruté de principio a fin cuando lo leí hace ya muchos año, es una novela histórica muy recomendable. Besos

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